El robo de combustible en las estaciones de servicio del valle de Toluca ha tenido un incremento durante las últimas semanas, en que se han registrado al menos 15 eventos en los cuales los automovilistas piden el tanque lleno o un consumo entre 600 y 700 pesos de gasolina y una vez obtenido el combustible huyen de la estación.
No se hace uso de la fuerza ni se amenaza a los despachadores, sin embargo, esto trae una afectación económica para las estaciones en municipios como Lerma, Toluca y Zinacantepec.
Jorge Luis Pedraza, presidente de la Asociación de Distribuidores de Gasolina y Lubricantes en el Valle de Toluca, refirió que es una situación que se presenta principalmente por las noches y en muchos de los casos no es denunciada.
A esto se suma otra situación que no ha permitido la reactivación económica del sector y es que el regreso a clases no trajo el repunte que se esperaba para la venta de combustible.
En las últimas semanas el incremento en las actividades alcanza apenas entre un 7y 10 por ciento, cuando se esperaba al menos un 20% en el crecimiento de las ventas relacionado al inicio del ciclo escolar.
“Este regreso escalonado híbrido no ha detonado las ventas como se esperaba, en las gasolineras urbanas sólo hemos conseguido aumentar entre un 7 y 10 por ciento cuando nuestra expectativa entre el 15 y 20 por ciento”.
Recordó que los viajes que se realicen semana tras semana son hasta en un 40% relacionados a los niños, es decir su asistencia a las escuelas, actividades extracurriculares o recreativas, situación que hasta el momento no se ha impactado a nivel estatal.
El incremento en el costo de los combustibles ha sido otra variante que se ha presentado de manera recurrente y es que al tener precios que superan los 20 pesos por litro, la población está haciendo más cautelosa del tipo de gastos y recorridos que realiza.
