Riesgo de terrorismo fiscal, incrementar recaudación de impuestos un 2.7%: IP

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Este año la Secretaria de Hacienda y Crédito Público tiene la meta de incrementar la recaudación de impuestos en un 2.7 por ciento para llegar a 3 billones 505 mil millones de pesos sin nuevos impuestos pero también sin hacer un incremento de la base de contribuyentes con la que se cuenta, lo que se pretende lograr con un recrudecimiento de las medidas fiscalizadoras que al momento se tienen.

Gilberto Sauza Martínez, presidente del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales (Foto: Rebeca Morales).

De acuerdo con Gilberto Sauza, Presidente del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales del Estado de México esto se traduce en un terrorismo y persecución de los contribuyentes que se suma a las pésimas condiciones de crecimiento económico que se tuvieron el año anterior y que se traducen en cierre de empresa e incluso reducción de planta laboral, por lo que se muestra poca sensibilidad al desarrollo de proyectos de emprendedurismo y ampliación de inversiones.

“Al parecer con lo que nos despertamos en este 2020, es con una legislación fiscal mucho más complicada para todos aquellos que pretendan emprender y para todos aquellos que día a día sacrificamos o ponemos en riego nuestro patrimonio… Entendiéndola nosotros como parte del sector como un terrorismo fiscal, como parte de visualizar que todos los ingresos sean perfectamente declarados cuando no se tiene sensibilidad alguna de que no todos los ingresos que se tienen deben ser ingresos que se generen algún tipo de ganancias”.

Indicó que medidas como el incremento en impuestos como IEPS, en refrescos, bebidas azucaradas, cigarros y de manera generalizada combustibles puede desencadenar incremento de precios en otros productos básicos, además en casos contables de las unidades económicas es más caro tener un error u omisión en el cálculo del impuesto, porque puede llevar a pagar penalizaciones que, en México, son intereses, recargos o multas y pueden representar de 150% a 200% de la contribución o del impuesto omitido.

En contraparte, no hay ninguna medida para reducir los índices de informalidad que hay en el país y que la momento significan hasta el 22 por ciento del Producto interno Bruto, por lo que ahora el llamado es a que al menos se tenga personal certificado para aplicar las nuevas reglas o de lo contrario se convertirá en una cacería de brujas y sanciones que los contribuyentes no podrán soportar.

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