A partir del decreto del Gobierno Federal en el que se incrementan en los aranceles para la importación de productos como acero, aluminio, caucho, calzado, vidrio, bambú, productos químicos y cerámica se abre una oportunidad para fortalecer a los productores locales, generar cadenas de proveeduría y dar cumplimiento a las reglas del Tratado de Libre Comercio en materia de componentes locales.

Julio Rodríguez Trigueros, Vicepresidente del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales del Estado de México (Concaem) señaló que esta medida traerá beneficios para mas de 200 mil empresas en el país al aminorar la entrada principalmente de productos asiáticos que por décadas han invadido el mercado mexicano.
El reto en esta materia, será entonces, generar el trabajo y la relación con otras entidades, generar cadenas regionales y de esta manera satisfacer la demanda, primero de México y después del mundo, en este sentido, dijo un ejemplo de que la configuración del comercio internacional esta cambiando es que a lo largo del último año las importaciones que realiza Estados Unidos de productos asiáticos ha caído en el orden del 24 por ciento.
“Lo primero que deberán realizar las empresas que tendrán un impacto por este decreto es pensar seriamente en desarrollar proveedores nacionales, sentar las bases para fortalecer las cadenas de valor nacionales y subirlos posteriormente a las cadenas de valor regionales y volverlos exportadoras indirectas o porque no, directos”
Mauricio Massud Martínez, Presidente del Concaem señaló que para el Estado de México es una oportunidad de fortalecer a las empresas manufactureras en sectores como el automotriz y químico, principalmente las pequeñas que están buscando convertirse en proveedoras de las empresas tractoras y que veían en la competencia de países como China, Corea del Sur e India posibilidades remotas de competir en cuanto a precio.
Al momento el déficit comercial que aun mantiene México en materia de comercio exterior alcanza los 120 mil millones de dólares.