La empresa india Hylenr asegura haber probado con éxito su reactor de fusión nuclear fría, un hito histórico que de confirmarse significaría el espaldarazo definitivo a una forma de energía nuclear mucho más barata, limpia y prácticamente ilimitada que asegure la independencia energética a nivel mundial, aseguran. En una demostración en directo, la compañía consiguió producir más energía de la se usó para hacer funcionar el reactor, algo que allana el camino a su despegue comercial.
La compañía asegura que logró una amplificación térmica constante de 1,5 veces de la energía introducida para arrancar el sistema. En su demostración consiguieron producir 150 vatios de calor a partir de una entrada eléctrica de 100 vatios. Aunque en las próximas iteraciones del sistema la compañía quiere aumentar la producción hasta 2,5 veces la energía necesaria.
El diseño del nuevo reactor nuclear de baja energía (LENR) ha recibido una patente por parte del gobierno indio. El sistema servirá para generar energía en las futuras misiones espaciales, producir vapor para múltiples aplicaciones, sistemas de calefacción para hogares y aplicaciones industriales, afirma la empresa.
“La patente del producto válida la inventiva de la tecnología y la viabilidad de integrar la LENR con los sistemas de generación de energía existentes para mejorar la eficiencia y reducir la dependencia de las fuentes de energía tradicionales. El enfoque propuesto aprovecha la LENR para amplificar la electricidad procedente de fuentes renovables y no renovables y aplicaciones espaciales con el objetivo último de multiplicar por 2,5 la producción de energía”, explica Siddhartha Durairajan, director general de la compañía.
La fusión nuclear es la forma de energía que se produce de manera natural en las estrellas. Las elevadísimas temperaturas de su interior hacen que los átomos de hidrógeno se muevan a gran velocidad y choquen entre ellos, superando la enorme fuerza de repulsión que experimentan sus núcleos, provocando la fusión y liberando energía.
Para reproducir este fenómeno en la Tierra, la mayoría de los grandes proyectos que están hoy en día en marcha usan reactores tokamak y otras formas de confinamiento magnético que tienen que conseguir crear un plasma a una temperatura de 150 millones de grados Celsius, 10 veces superior a la del núcleo solar.
Otro método muy utilizado es el confinamiento inercial mediante láseres. En lugar de usar enormes imanes como hacen los tokamaks para mantener controlado el plasma, se utilizan láseres muy potentes que inciden en una pequeña cápsula cilíndrica que contiene deuterio y tritio, dos formas de hidrógeno. Los láseres hacen que aumente la presión y la temperatura a más de tres millones de grados Celsius, haciendo implosionar el hidrógeno hasta que se fusionan creando núcleos de helio (partículas alfa) y liberando energía.
Sin embargo, muchos investigadores están trabajando en otra alternativa que no requiere tanta energía y, por tanto, puede generar electricidad de manera más barata y eficiente. Se trata de los reactores nucleares de baja energía, también llamados reactores de fusión fría porque pueden unir los núcleos de hidrógeno a temperatura ambiente.
Esta tecnología fue propuesta por primera vez en 1989 por los electroquímicos Martin Fleischmann y Stanley Pons. Los investigadores hicieron pasar electricidad a través de una varilla de paladio sumergida en agua pesada, una forma de agua en la que los átomos de hidrógeno se sustituyen por el deuterio.
El sistema emitió cientos de veces más calor de lo que se podía esperar según las leyes de la química. Los investigadores aseguraron que la única explicación a este fenómeno es que los núcleos de deuterio del paladio se estaban fusionando. La noticia causó un gran revuelo por el potencial que una tecnología así podría suponer para resolver todas los problemas energéticos de la humanidad.
Sin embargo, otros científicos fueron incapaces de replicar los resultados de Fleischmann y Pons y gran parte de la comunidad científica cree que la fusión fría es una idea teórica sin aplicación práctica. Las críticas contra el dúo de investigadores fueron feroces y Fleischmann y Pons se exiliaron al sur de Francia para continuar sus experimentos con financiación privada.
Ahora parece haber un nuevo resurgimiento de la fusión fría. En marzo de 2022 una investigación financiada por Google analizó la fusión fría y, aunque no encontró pruebas del fenómeno descrito por Fleischmann y Pons, su trabajo ha mejorado las técnicas de medición y la investigación de materiales.
Ahora Hylenr asegura haber conseguido la fusión fría con éxito. El nuevo reactor funciona aplicando una pequeña cantidad de electricidad para estimular unos miligramos de hidrógeno y generar un exceso de calor mediante la fusión que puede producir el vapor necesario para producir electricidad con una turbina.
Durairajan explica que la fusión fría arranca también cuando dos átomos de hidrógeno se fusionan. Eso crea Helio3, que es inestable, pero luego otro átomo de hidrógeno se fusiona creando Helio4, que es estable. La liberación de este exceso de hidrógeno es el responsable de generar el calor, asegura.
“Nuestro producto está listo para el mercado y también tenemos la patente concedida. Actualmente estamos trabajando con una gran empresa de tecnología espacial para su despliegue”, dice Durairajan. “Este producto es aplicable a todos los sectores energéticos y aportará independencia energética mundial y la forma de energía más limpia”.