La industria maderera ha entrado en un modelo de regularización y ordenamiento derivado de las condiciones de inspección que se han dado durante los últimos años y que ha ocasionado la formalización de más del 50 por ciento de los establecimientos y la desaparición de muchos más de ellos.
Gabriela Ramírez, presidenta de la Cámara de la Industria Maderera en el Estado de México aseguró que al ser un sector regulado y auditado por los tres niveles de gobierno se ha tenido que entrar en un nivel de mayor orden pues es un tema sensible el que se toca y en el que por años se permitió el manejo de madera clandestina.
Al momento, dijo, son mil 700 empresas de la cadena productiva que van desde el corte, distribución y fabricación de muebles los que concentran y a quienes se ha buscado llevar a un nivel de mayor interlocución con la autoridad con el fin de quitar el estigma que se arrastró por años.
Indicó que el siguiente paso es el hacer crecer al sector e involucrarlo en modelos de manejo sustentable que permita seguir la generación de empleos pero además retomar los niveles de crecimiento que tuvieron hace años.
