El dirigente de la sección 28 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, Ismael Valdés López, culpó a los medios de comunicación del escándalo de las Hummers que les regaló la dirigente nacional, Elba Esther Gordillo, el pasado fin de semana en esta capital, porque «se tergiversaron las cosas».
Aseguró que desde que inició el Consejo Extraordinario del SNTE, el viernes anterior, se consensuó que los vehículos de lujo serían rifados con el objeto de recaudar fondos y canalizarlos a escuelas marginadas.
«Así se tenía planteado y así se acordó al finalizar el evento, pero se tergiversaron las cosas», aseguró.
La declaración de Ismael Valdés se contrapone a los comentarios que esa misma noche se hicieron dentro y por fuera del salón de convenciones Sabor y Arte, de la colonia Country Club de esta capital, sede del Consejo Extraordinario, entre los propios asistentes, que quedaron asombrados con el regalo.
Valdés López reconoció que de manera periódica la dirigencia del Sindicato les otorga una unidad nueva. La más reciente fue una Explorer.
«Pero ésta (la Hummer) no es la que nos van a regalar, todavía está pendiente nuestro carro, esta es para rifarla», aseguró.
Comentó que los vehículos se encuentra bajo resguardo, en las instalaciones de las secciones sindicales, y justificó la rotulación del logotipo del «SNTE».
Es para que la gente sepa quién hace la rifa, aseveró
«En una semana más saldrá la convocatoria del sorteo y ya podremos hablar de esta rifa», mencionó.
Por su parte, el dirigente de la sección 54 (también con sede en esta capital) Emigdio Coronado Bússani, reiteró que nunca hubo la intención de quedarse con las camionetas, pero que no lo pudieron aclarar el domingo porque el resolutivo del Consejo fue publicado hasta este lunes.
