Lo que nace con violencia genera violencia, así lo dijo el Arzobispo, monseñor Francisco Javier Chavolla Ramos, al pronunciarse en contra de las manifestaciones que buscan legalizar el aborto en el estado de México, incluso dijo ofrecer su vida a cambio de que no se autorice suspender un embarazo antes de las 12 semanas de gestación.
Chavolla Ramos, acudió a la ordenación de seis diáconos y tres sacerdotes en la Catedral de Toluca, en donde además se manifestó a favor de la vida y en contra del aborto; añadió que la Suprema Corte de Justicia de la Nación, no es la autoridad de las consciencias.
Agregó que los grupos feministas tienen derecho a manifestarse, pero no agredir a las personas o bien a las instituciones, por lo que consideró su actuar es contradictorio, al no respetar la ley.
Durante la celebración litúrgica, por la ordenación sacerdotal, aprovechó para invitar a los fieles católicos a marchar por la vida, y promover el respeto por la misma.
