Hecho un ovillo, encogido por los gritos de sus padres en el asiento delantero del automóvil, Paco, el niño de casi 10 años, enternece al público. Se hace un nudo en la garganta al ver su cara de angustia y su gesto compungido. Se oprime el pecho al escuchar a grito destemplado los reclamos que se ha guardado en su corazón pequeño y abrumado. Hasta que se transporta a mundos alternos, al del comandante Apolo, al de luchador “90 por ciento algodón, 10 por ciento poliester”, al del mago, al del ensueño… Trances, sueños con los ojos abiertos, casi todos con final feliz para afrontar la separación de sus padres.
Pedro Faritt, quien encarna al “niño de 9 casi 10”, se roba la puesta en escena “Los sueños de Paco” de la Compañía Universitaria de Teatro y Valija Teatro que se presenta los sábados a la una de la tarde, hasta el 28 de abril, en el Teatro Universitario Los Jaguares.
La puesta en escena, de la autoría de Carlos Corona y con la dirección del sólido actor José Cotero, aborda las dificultades del divorcio para un niño, que busca en sus fantasías el bálsamo del drama familiar. La actuación de Faritt se complementa con el vigor actoral de Yolanda Segura, la capacidad de Erick González de encarnar lo mismo a un villano interestelar que a un luchador de la triple A, así como la simpatía interpretativa de Montzerrat Avilés.
Se hace buen teatro en Toluca. Bastan unas cajas de cartón y retazos de tela, una selección musical ochentera y pegajosa —mérito de Angélica Hernández—, y una presencia constante del autor, a través Giovanni Santzález, para que un drama parezca de pronto un momento jocoso en el que se ríe llorando. Las compañías teatrales universitarias se sobreponen a todo, incluso a que sea prioritario gastar millones en una competencia deportiva en vez de tener una taquilla bien puesta en un espacio como el Teatro de los Jaguares.
Valija Teatro tiene momentos cumbres sin tanta parafernalia —y merecería tenerla—: el guiño a La Guerra de las Galaxias, la artista húngara y el títere abrumado con toneladas de sentimientos reprimidos. Pero Paco, un niño de casi 10, ingenuo y efusivo, va siempre por delante.
“Los sueños de Paco”, de Carlos Corona y dirección de José Cotero, se presenta los sábados, hasta el 28 de abril, en el Teatro de los Jaguares (Gómez Farías poniente 610). Entrada general, 60 pesos, niños, 30.
