Esta noche es una de las más esperadas por los niños y es que hoy llegan Melchor, Gaspar y Baltazar. Y aunque el Día de Reyes es una de las celebraciones más famosas, al menos en México; pocos conocen su origen.
Primero cabe mencionar que la tradición del Día de Reyes se menciona en el evangelio. En él, se indica que los reyes llegaron donde estaba el Niño Jesús, tras una larga caminata guiados por una estrella. Al llegar con Jesús, le ofrecieron oro para venerar su esencia divina; incienso para celebrarlo como Dios y mirra para adorar su grandeza como hombre. Esta es la historia que la mayor parte de los mexicanos conoce. Sin embargo, existen diversas versiones.
De acuerdo con investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia; luego de la conquista española, comenzaron a realizarse representaciones similares a las obras de teatro, las cuales recibían el nombre de nexcuitiles que no era sino una forma de adoctrinamiento.
Esta forma de adoctrinar tenía por objetivo imponer un nuevo dios en el imaginario colectivo de la Nueva España empalmándolas con las creencias que ya se tenían; por lo cual los evangelizadores buscaron en todo momento difundir las ideas religiosas. En estas representaciones existía una que simbolizaba la adoración de los reyes y se volvió casi una tradición que los evangelizadores franciscanos encendieran hogueras la noche del 6 de enero, el Día de Reyes.
Los Reyes se mencionan en el Evangelio de San Mateo en el que se hace referencia a unos peregrinos que llegaron desde oriente a Judea para adorar a Jesús. Aunque muchos investigadores consideran que esos personajes podrían ser en realidad originarios de Persia.
Así como el origen de Los Reyes Magos es incierto, también lo es el número de ellos pues por tradición se menciona que fueron tres. Aunque también existen otras teorías que señalan que pudieron ser 12 relacionando este número con las tribus de Israel y con los 12 apóstoles. En tanto, existe una versión que aseguran eran en total 60.
El aspecto físico de los reyes Magos es otro elemento incierto. La imagen que prevalece hoy en día sobre estos personajes surgió en la Italia medieval y luego llegó al continente americano. Hay también muchas variantes en sus nombres, pues en hebreo reciben el nombre de Apelio, Amerio y Damasco; en griego Gálgala, Malgalat y Sarathin y en lengua latina Melchor, Gaspar y Baltazar.
Así como son diversas las teorías sobre el origen de los Reyes Magos y su aspecto, también son numerosas las representaciones que artistas han realizado de estos personajes. Por ejemplo, Antonio de Torre creó la obra “Adoración de los Reyes Magos” en el año 1719; la pintura permanece en el Museo de Guadalupe ex convento de Nuestra Señora de Guadalupe en Zacatecas. Los Reyes Magos también se han representado en esculturas que datan del Siglo XVII; una de ellas lleva su nombre, aunque son sólo dos piezas y se encuentran en el Museo Nacional del Virreinato, ubicado en el municipio de Tepotzotlán en el estado de México. Incluso, se tienen registros que desde la antigua Roma ya existían representaciones de Los Reyes Magos.
Existen muchas contradicciones en torno a esta celebración, lo cierto es que el Día de Reyes es una de las tradiciones más esperadas, sobre todo por los más pequeños; aunque este año el festejo podría ser más discreto debido a las afectaciones económicas que ha traído consigo la contingencia sanitaria.
