Un análisis de los genomas completos de 32 especímenes representativos de tigres confirman una división de esta especie en seis grupos genéticamente distintos.
Estas seis subespecies, que se detallan en un artículo sobre el trabajo publicado en ‘Current Biology’, incluyen el tigre de Bengala, el tigre de Amur, el tigre del sur de China, el tigre de Sumatra, el tigre de Indochina y el tigre de Malaya, propuestos por primera vez en 2004. Otras tres subespecies de tigre ya se han extinguido.
“La falta de consenso sobre el número de subespecies de tigres ha obstaculizado parcialmente el esfuerzo global por recuperar las especies al borde de la extinción, ya que tanto la cría en cautividad como la intervención en el paisaje de poblaciones silvestres requieren cada vez más una delineación explícita de las unidades de gestión de conservación”, dice Shu-Jin Luo, de la Universidad de Pekín.
“Este estudio es el primero en revelar la historia natural del tigre desde una perspectiva genómica completa. Proporciona pruebas sólidas de todo el genoma del origen y la evolución de esta carismática especie de megafauna”, añade.
Luo y sus colegas, incluido el primer autor Yue-Chen Liu, se propusieron ampliar su evidencia genética anterior sobre la historia evolutiva y la estructura de la población del tigre utilizando un enfoque de genoma completo. Se dieron cuenta de que la detección de todo el genoma también era la única forma de buscar señales de que distintos grupos de tigres se habían sometido a una selección natural para adaptarse a los entornos que se encuentran en las distintas regiones geográficas que habitan.
La evidencia fósil muestra que los tigres se remontan a dos o tres millones de años. Pero, la evidencia genómica muestra que todos los tigres vivos solo se remontan a un tiempo hace unos 110.000 años, cuando los tigres sufrieron un cuello de botella histórico en la población.
La evidencia genómica muestra que hay muy poco flujo de genes entre las poblaciones de tigres. A pesar de la baja diversidad genética del tigre, el patrón a través de los grupos está altamente estructurado, ofreciendo evidencia de que cada subespecie tiene una historia evolutiva única. Eso es bastante singular entre los grandes felinos, dicen los investigadores, señalando que varias otras especies, como el jaguar, han mostrado mucha más evidencia de entremezcla en todos los continentes.
Las subespecies de tigre tienen características distintas. Por ejemplo, los tigres de Amur son grandes con pelaje de color naranja pálido, mientras que los tigres de Sumatra en las Islas Sunda tienden a ser más pequeños con un pelaje más oscuro y con rayas gruesas. De hecho, a pesar del ancestro común muy reciente de todos los tigres vivos, los investigadores pudieron detectar evidencia de selección natural.
“Al final, nos sorprendió bastante que, al realizar un escaneo gradual del genoma, siete regiones, incluidos 14 genes, destacaron como las posibles regiones objeto de selección”, explica Luo. La señal de selección más fuerte que encontraron fue en el tigre de Sumatra, a través de una región genómica que contiene el gen ADH7 relacionado con el tamaño del cuerpo.
Los investigadores sugieren que el tigre de Sumatra podría haber reducido su tamaño para disminuir sus demandas de energía, permitiéndole sobrevivir gracias a los animales de presa más pequeños de la isla, como los cerdos salvajes y el muntiacus, un ciervo pequeño. Los nuevos hallazgos proporcionan evidencia genética de delineación de subespecies en tigres.
“Los tigres no son todos iguales –dice Luo–. Los tigres de Rusia son evolutivamente distintos de los de la India. Incluso, los tigres de Malasia e Indonesia son diferentes”. El origen del tigre del sur de China sigue sin resolverse, ya que en este estudio solo se utilizó un espécimen de cautiverio, señalan los investigadores.
Desafortunadamente, esta subespecie se ha extinguido en la naturaleza. Los investigadores planean analizar especímenes antiguos de origen conocido de toda China para completar los fragmentos faltantes de la historia evolutiva de los tigres vivos. También están recuperando información genómica de especímenes históricos, incluidos los que representan a los tigres extintos del Caspio, Java y Bali.
Fuente: EP