El uso de las tecnologías también ha llegado al ámbito financiero y al uso de páginas web o aplicaciones para la apertura de cuentas bancarias.
De acuerdo con un estudio realizado por la firma FICO, dedicada al análisis de operaciones crediticias, el 88 por ciento de los mexicanos están preparados para abrir una cuenta a través de estos medios en lugar de asistir a una institución bancaria.
En el 67 por ciento de los casos se asegura que podrían aquí una tarjeta de crédito, el 55 por ciento una cuenta corriente y el 50% un préstamo personal.
Entre los puntos en los que aún hay cierta inseguridad para los usuarios es la forma en la que tienen que probar su identidad, domicilio o los datos biométricos.
El 67 por ciento de los usuarios de instituciones financieras tienen entre 35 y 44 años y son los que más se han incorporado al uso de estas nuevas tecnologías.
Entre los elementos que son determinantes para que una persona desista de abrir una cuenta a través de medios digitales están el que se le pida acudir a una instalación física del banco para concluir el proceso y en el 17 por ciento de los casos ante una situación de este tipo buscarán acudir a la competencia para realizar el mismo procedimiento.