A dos semanas del regreso presencial a las escuelas de la entidad mexiquense, la evaluación es buena en cuanto a la aplicación de protocolos sanitarios ya que que al momento no se ha detectado algún caso de contagio de Covid-19, sin embargo, es necesario que las autoridades educativas den a conocer a los padres de familia un informe final del avance y la situación académica en que se hallan los alumnos.

Así lo destacó el representante en el estado de México de la Unión Nacional de Padres de Familia, José Luis Romero y agregó que con el inicio del próximo ciclo escolar, deberá llevarse a cabo un diagnóstico de la condición de los alumnos y aplicarse de forma inmediata un programa de regularización.
Comentó además que si bien se ha hecho un esfuerzo por dar mantenimiento a las escuelas e implementar los protocolos del regreso seguro, tanto en nivel básico, como en las que tienen actividad en talleres y laboratorios, la organización que representa estima que unas cien escuelas del Valle de Toluca no pudieron ser reabiertas por la carencia de servicios básicos como agua potable y electricidad.
Mientras que ese porcentaje se duplica en el caso de las instituciones educativas del Valle de México, sobre todo en los municipios de Chimalhuacán y Nezahualcóyotl.
José Luis Romero dijo que en estas dos semanas de actividades presenciales en las escuelas se ha mantenido el porcentaje de alumnos que regresaron a las aulas, que fluctuó entre un 15 y 20% de los estudiantes y así se prevé concluya hasta el cierre del actual ciclo escolar.
Reiteró que este bajo porcentaje se debió sobre todo a cuestiones de previsión de contagios.
Asimismo, comentó que será importante la atención socioemocional para que los estudiantes sean canalizados para su atención.