Las mujeres poco a poco se han ido abriendo el paso en el ámbito de la ciencia y la tecnología, realizando grandes aportes para mejorar la vida de los seres humanos. Con esfuerzo y dedicación, se han enfrentado la opresión y demostrado al mundo de lo que se es capaz. Por ejemplo, estos son algunos de los increíbles inventos que utilizamos de manera cotidiana y que seguro no sabías que fueron hechos por mujeres.
-Limpiaparabrisas: En 1903, Mary Anderson patentó el primer diseño de limpiaparabrisas. La idea se le ocurrió durante un invierno en que viajaba en tranvía por Nueva York y observó que los conductores debían abrir las ventanas para ver el camino o detener la marcha para limpiar el parabrisas, pues la nieve que caía les obstruía la visibilidad.
Ese primer modelo consistía en una palanca que estaba por dentro del vehículo y controlaba un brazo que tenía una escobilla de goma. La palanca tenía un contrapeso para mantener la escobilla en contacto con la ventana y moverla sobre el parabrisas.
-WiFi y Bluetooth: Si estás leyendo este artículo en internet es gracias a Hedwig Eva Maria Kiesler, mejor conocida como Hedy Lamarr, debido a que también era actriz de cine (sí, era tan bella como inteligente). Además de protagonizar más de 30 películas. Hedy estableció las primeras teorías de la modulación radial, misma que permite el envío y recepción de información vía inalámbrica.
Aunado a esto, durante la Segunda Guerra Mundial se basó en el principio musical de George Antheil para crear el Sistema Secreto de Comunicaciones, el cual es capaz de controlar torpedos teledirigidos con 88 frecuencias diferentes.
-Chaleco antibalas: Miles de policías y agentes del orden han salvado su vida gracias a Stephanie Kwolek, la científica que inventó el poliparafenileno tereftalamida, es decir, una súper fibra sintética conocida como Kevlar y que es cinco veces más resistente que el acero.
Gracias a que es ligera y muy fuerte, esta fibra es empleada para fabricar chalecos antibalas, cables submarinos, frenos de automóvil, cables de fibra óptica, partes de aviones, tecnología espacial, entre otras cosas.
-Enlatado al vacío: Las investigaciones de Amanda Jones hicieron posible que a partir del siglo XIX pudiéramos disfrutar de las útiles y prácticas latas de conservas. Almacenar y transportar los alimentos de esta manera ayuda a preservarlos en buen estado por más tiempo.
-Típex / Corrector líquido / Liquid Paper: En 1956, Bette Nesmith Graham inventó un producto al que bautizó como ‘Mistake Out’ (fuera errores), ya que servía para corregir los errores en los textos elaborados en máquina de escribir, sin tener que repetir todo el documento. La mecanógrafa elaboró el producto con agua y pintura blanca, y lo comercializó en su propio hogar con el nombre de Liquid Paper.
-Lavaplatos: Durante la última década del siglo XIX Josephine Cochrane vio consagrada su idea de una máquina que lavara las vajillas con suavidad, sin rayarlas y sin dejar ningún rastro de suciedad.
-Monopoly: Con la intención de advertir al mundo del peligro de la aparición de grandes monopolios, Elizabeth Magie diseñó una manera lúdica de mostrar al mundo este aspecto del capitalismo. Sin embargo, en la década de 1930 Charles Darrow tomó su idea, le hizo algunos cambios y lo patentó como el juego de Monopoly que hoy conocemos.
-Lenguaje de programación COBOL: Grace Hopper es conocida por ser una de las pioneras de las ciencias de la computación. En 1952 patentó el primer compilador, es decir, un programa que traduce las palabras e instrucciones al lenguaje de los ordenadores. Tambièn fue programadora de la primera computadora a gran escala de Estados Unidos (la Mark I) y creó el primer lenguaje universal de programación llamado COBOL (Common Business Oriented Language).
-Pañales desechables: Fue en el año 1946 cuando Marion Donovan diseñó el primer pañal desechable. Hasta ese momento las madres utilizan paños de tela que debían lavar y esterilizar luego de cada uso, además de que eran poco absorbentes y constantemente se mojaba la ropa del bebé y hasta las sábanas de la cama.
Marion empleó una cortina de baño y relleno absorbente para confeccionar el primer pañal que no causara irritación en la piel del bebé y la mantuviera a salvo de la humedad. Luego de perfeccionar su diseño, vendió la patente por dos millones de dólares.
Con información de: vix.com