•¿Quién se burla más, Zamacona o Medellín?
•Higinio Martínez aún busca el consenso
•Que pesan intereses privados en decisiones de tránsito en Toluca
¿Quién se burla más de los periodistas mexiquenses, el diputado Guillermo Zamacona o el director de Comunicación Social de la Cámara de Diputados, Alfredo Medellín?
Del priista Zamacona nada sorprende. Está en su ADN de político tricolor prometer y luego olvidar. Su trabajo frente al Comité de Comunicación Social del Poder Legislativo ha sido complaciente con la mofa y el desprecio con el que Medellín ha tratado a la prensa legislativa. Como si el diputado de Huixquilucan compartiera esta posición y, de manera tácita, la alentara y aplaudiera.
Hace ya nueve meses, Guillermo Zamacona prometió que Medellín comparecería ante los diputados, con lo que implica la idea de “comparecer”. Ahora, todo queda en que “sigue pendiente una reunión”. De comparecencia… nada. En este alejamiento y falta de solidaridad con la prensa, desafortunadamente apareció como comparsa en la reunión de comisiones el naucalpense Enrique Jacob.
Alfredo Medellín, por su parte, ha sido un ariete. Un instrumento que —bajo la protección de un grupo de diputados de la cuatro te— desde las facultades que le otorga el organigrama de la Cámara de Diputados ha querido inventar el hilo negro e imponer reglas que han llegado al menosprecio y hasta la humillación de la prensa y de los servidores públicos de la Cámara de Diputados.
Nadie lo ha hecho rendir cuentas. Al contrario, le han hecho pensar que es intocable. Y Zamacona es parte de eso.
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El senador Higinio Martínez se sinceró con un grupo de periodistas: no logró el consenso con sus compañeros de partido y de lucha. Especialmente con aquellos a los que incluso formó politicamente. Así que con el respaldo de un grupo numeroso de diputados locales, federales, presidentes municipales, exdiputados y exalcaldes, buscará la nominación de Morena, primero a la representación “de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación en el estado” y posteriormente a la candidatura a la gubernatura mexiquense.
Martínez Miranda confía en que la candidatura de Morena quedará en manos de un texcocano. Y ofreció su apoyo y respaldo, sea quien sea quien aparezca en la encuesta de Morena. Sin renunciar a que de aquí al 10 de agosto —fecha prevista para la definición— se consiga el anhelado consenso.
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¿Será verdad que la idea de Jorge Pedro Flores Marker, coordinador General de Conservación Ecológica de la Secretaría del Medio Ambiente, de credencializar y dar un tarjetón de acceso al Parque Bicentenario tiene como fin último privatizar ese espacio?
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Hablando de intereses privados. Me dicen que la decisión de la Dirección de Sustentabilidad Vial del gobierno de Raymundo Martínez Carbajal de convertir a la calle de Antonio Albarrán, el tramo de Paseo Tolocan a Las Torres, en una vía de sentido sur-norte y eliminar el tránsito en dos sentidos, es producto de intereses particulares. “La calle era un gran desahogo para el tránsito de Heriberto Henríquez. Parece que los caprichos de un empresario amigo de altos funcionarios municipales inclinó la balanza. Ya sabes: poderoso caballero…”
Capricho o no, intereses privados o no, lo cierto es que la medida ha resultado perjudicial para el tránsito de la lateral del Paseo Tollocan y de Heriberto Enríquez, cuyos embotellamientos alcanzan medio kilómetro en horas pico, lo que provoca que un recorrido que en condiciones normales toma dos minutos se convierta en un camino a vuelta de rueda de hasta 10 o 15 minutos.
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