Este 16 de diciembre habría cumplido 58 años Antonio Vega, un músico español, referente de la época de La Movida madrileña que en México se conoció como la ola del rock en español.
Pero apenas llegó a cumplir 51 años, porque pasó a morirse allá por 2009.
Quizás su nombre no significa nada para muchos, pero si digo que formó parte de Nacha Pop y que de su autoría son algunos de los más grandes éxitos de ese grupo, tal vez se les refresque la memoria. Y más si menciono que compuso e interpretó Lucha de Gigantes.
Pues hoy recuerdo al maestrísimo Antonio Vega y a su música, con la que tuve contacto por primera vez hace unos 25 años —un cuarto de siglo, para que no se escuche tan abundante— cuando en México se escuchaban fuerte Lágrimas al suelo, Persiguiendo sombras o Asustado estoy y Nacha Pop llenaba la Plaza de Toros México.
De entonces a la fecha ha formado parte de la pista musical del recorrido del arriba firmante.
Así que no he podido resistir rendirle un homenaje con estas letras a uno de los más grandes músicos que haya tenido el rock en español. ¡Y vaya que hay muchos! Pero el genio, la conexión, la sensibilidad y la fragilidad de Antonio Vega no tienen comparación.
Allá donde andes, Antonio Vega, ¡feliz cumpleaños!
