El Consejo Coordinador del Estado de México (CCEM) ha planteado a las autoridades del Poder Judicial, la necesidad de tipificar como grave el delito de acaparamiento de precios, ligado a la extorsión en comerciantes que al ser condicionados para adquirir productos con un determinado proveedor deben aumentar sus precios.
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Laura González, presidenta de este organismo aseguró que en el Valle de Toluca, delegaciones como Cacalomacán, Capultitlán, San Buenaventura, San Juan Tilapa y Santiago Tlacotepec son en las que se ha presentado más este tipo de extorsiones en las cuales comerciantes de pollo, verduras, carne entre otros son obligados a abastecerse con ciertos proveedores.
Se presume que son bandas organizadas ligadas a la organización delictiva “La Familia Michoacana”, sin embargo el organismo no tiene denuncias reales al respecto.
Indicó que la estrategia que se busca establecer es que las denuncias se puedan hacer vía anónima, ya que muchos de los involucrados tienen miedo de las represalias a las que puedan ser sujetos, pues las amenazas son graves e incluyen daños a sus familias.
Indicó que esta es una de las modalidades de extorsión que se ha presentado de manera más frecuente y también reciente, como una forma de controlar el mercado, pero además que afecta a los consumidores finales, ya que al tener precios tan elevados los comerciantes también se ven obligados a elevar los costos al consumidor final.
De esta manera el, Poder Judicial debería analizar las implicaciones y verdaderos efectos de tener un tipo penal en este sentido.