El riesgo más importante y latente que podría tener la industria automotriz en nuestro país derivado de nuevas políticas económicas en Estados Unidos está ligado a una actualización de negociación del Tratado de Libre Comercio (TLC) con lo cual se podrían incrementar las cuotas arancelarias a los autos mexicanos hasta en un 35%.
Ernesto Sánchez, presidente de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Autos en el Estado de México aseguró que este es uno de los puntos que podría estar en riesgo al tener un costo anual de Estado 200 mil millones de dólares sólo para las plantas establecidas en la entidad lo cual afectaría la producción y distribución de automóviles desde nuestro país.
Actualmente en el Estado de México hay 450 plantas relacionadas a la producción, proveeduría y distribución de automóviles, uno de los sectores más importantes en materia económica del Estado.
Precisó que al momento no ha habido un impacto en los costos de los automóviles nuevos a la venta, ya que los distribuidores han buscado mantener el costo bajo para ofrecer oportunidades a los consumidores, sin embargo es probable que el siguiente año pudiera haber una aceptación.
