Luego de la aprobación del matrimonio igualitario en el Estado de México, el vocero de la Arquidiocesis de Toluca, el sacerdote Jorge Rosas Suárez, resaltó el respeto de la institución religiosa por las personas, las instituciones y las autoridades y el deseo de que, agregó, a nadie se le rechace o discrimine.
Sin embargo dijo que les preocupa que la palabra matrimonio se aplique a una relación de convivencia igual, pues desde el plan de Dios se habla de la unión entre un hombre y una mujer generadores de vida y al mismo tiempo, generadores de una familia y que además aportan para la sociedad muchos valores.
Y si bien, agregó, se dio la aprobación de los matrimonios igualitarios, ahora lo que se pide es una convivencia y un trato respetuoso sobre las creencias de la iglesia.
Aseguró que la Arquidiócesis de Toluca comprende que la labor de los legisladores locales es velar por los intereses de toda la población.
Reiteró que están en contra de la discriminación o rechazo a las personas por su forma de ser, su manera de pensar, o su modo de vivir y también que les nieguen sus derechos, a la vida, a decidir, a la libertad religiosa, incluso a compartir la vida con quién ellos lo decidan.
Refirió que la Arquidiócesis de Toluca externó su punto de vista e hizo llegar documentos al Congreso mexiquense a través de grupos cristiano-católicos y no católicos, labor a la que también contribuyó el Consejo Interreligioso del Estado de México..
Reiteró que respetan la desición de los legisladores y pidió a la comunidad que tenga en cuenta que la iglesia cristiana católica seguirá defendiendo sus principios y valores y mencionó que seguirán trabajando por la formación de las personas, por ayudar a niños y jóvenes y a las familias a custodiar y proteger lo que consideran un sagrado proyecto divino.
