La Policía Federal presentó este jueves en el centro de mando de Iztapalapa a 10 presuntos sicarios del cártel de Arturo Beltrán Leyva que tenían la misión de eliminar a miembros de la banda rival La Familia en Tultitlán.
En el grupo se encontraban dos menores de edad, un hombre y una mujer de 17 años, que fueron presentados junto con el resto de los sicarios ante cámaras, pese a las disposiciones legales que lo prohíben.
En conferencia de prensa, el comisionado de la Policía Federal Preventiva, Rodrigo Esparza Cristerna, explicó que el grupo estaba liderado por Carlos Villanueva de la Cerda, alias Óscar Ochoa o El Comandante 8, de 36 años, originario de Nuevo Laredo, Tamaulipas.
De acuerdo con el funcionario, Villanueva era le jefe de la estructura, y «responsable de establecer el centro de operación en el Estado de México, coordinando la logística de identificación de grupos rivales para su eliminación».