Las protestas en contra del aumento al transporte de pasajeros en el estado de México, incluida la de hoy, están totalmente justificadas porque el servicio que prestan los concesionarios no tiene calidad.
Escucha el comentario de Patricia Maldonado. Dale play:
Durante décadas se ha pedido una renovación en las unidades así como un trato adecuado a los usuarios y esto no ha sucedido.
Los concesionarios han privilegiado las ganancias a la modernización y ordenamiento del transporte y han ignorado incluso modelos de transporte articulado y sustentable a través de los cuales pueden trabajar y obtener ganancias conjuntas. Les interesa operar de forma anárquica poniendo en riesgo además la integridad de los tripulantes. Basta recordar los casos de choques, atropellamientos y asaltos en que se han visto involucrados los camiones.
Pedir aumento al transporte es por tanto, incongruente, absurdo. Es pagar por algo que no sirve. No sirve en estructura, organización y funcionamiento. En movilidad de las personas. No está de más insistir en que la calidad de vida de una ciudad se mide en su sistema de transporte.
