El 5 de julio se conmemora el Día del Terapista Físico y Ocupacional, profesional que se encarga del manejo de desórdenes que impliquen complicaciones en el movimiento corporal así como de la aplicación y seguimiento de la prescripción de un médico especialista a través de ejercicios de rehabilitación.
La doctora Erika Guerrero Vilchis, coordinadora de Medicina Física y Rehabilitación del Hospital General Regional No. 251 de la Delegación Estado de México Poniente del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), menciona que los servicios de rehabilitación, brindan consulta y tratamiento a derechohabientes con alguna enfermedad que limita sus actividades cotidianas.
Con la colaboración de 27 terapeutas físicos y seis ocupacionales, este hospital atiende aproximadamente a 750 pacientes al mes, con padecimientos como lumbalgias, esguince cervical, de rodilla y tobillo; fracturas, evento vascular cerebral, osteoartritis y riesgo de daño neurológico son algunos de los padecimientos más recurrentes en este servicio.
Asimismo otorga siete mil 200 sesiones de terapias, entre las que destacan: electroterapia, ultrasonido, fluidoterapia, mecanoterapia, hidroterapia y rehabilitación robótica.
La especialista del IMSS Poniente concluyó que algunos movimientos que se realizan cotidianamente pueden causar lesiones; desde cambiar de postura hasta desplazarse por largas distancias; por ello recomienda consultar a un terapista especialmente si un trabajo requiere esfuerzos constantes o bruscos, así podrá indicarle la forma correcta de realizar sus actividades, sin riesgos para la salud.
