Por segundo año consecutivo, el Gobierno de Huixquilucan llevó a cabo la caminata familiar “Dejando Huella por los Derechos Humanos”, con la participación de más de 60 familias con igual número de lomitos, quienes recorrieron calles de la Zona Popular Baja para promocionar estos derechos, con la finalidad de construir una sociedad más justa y equitativa para las futuras generaciones.
Teniendo como punto de partida el Edificio Administrativo Pirules, los participantes, convocados por la Defensoría Municipal de Derechos Humanos, caminaron hacia la Delegación de la colonia Palo Solo, y en su trayecto portaron pancartas con leyendas para promocionar el derecho a la vida, a la familia, a la educación, a una vida libre de violencia, a la igualdad y no discriminación, a una buena administración pública, a la cultura física y al deporte, a la integridad y seguridad personal, entre otros.
La presidenta municipal, Romina Contreras, destacó la importancia de llevar a cabo este tipo de actividades, donde se involucra a todos los integrantes de la familia, ya que es desde el hogar donde se inculca el respeto a los derechos humanos, para una convivencia armónica.
“Los derechos humanos son la base de una sociedad más justa, equitativa y pacífica y, con esta caminata, el gobierno de Huixquilucan reafirma el compromiso con las y los habitantes del municipio de trabajar por estas garantías que protegen la integridad de las personas, ya que cada una, sin importar su origen, género, religión o cualquier otra condición, merece ser tratada con igualdad, dignidad y respeto”, apuntó Romina Contreras.
“Cada pequeño acto cuenta y juntos podemos construir un mundo más justo y humano, ya que mientras aún existan personas que sufran discriminación, violencia y exclusión, es crucial que sigamos trabajando unidos para garantizar que los derechos humanos sean una realidad para todas y todos. Quiero agradecer a cada uno de ustedes por estar aquí hoy, su presencia es una muestra de solidaridad y un recordatorio de que juntos podemos marcar la diferencia”, señaló.
Como parte de la caminata familiar “Dejando Huella por los Derechos Humanos”, se entregó un kit para cada perrito que participó, que incluía una correa retráctil, un bebedero portátil, un sobre de alimento para canes, botella de agua, así como un dispensador de bolsas para desechos de mascotas, entre otros artículos.