Los daños en la carpeta asfáltica de las calles y vialidades de la ciudad de Toluca comienza a ser notorio de nueva cuenta a un mes de haber comenzado formalmente la temporada de lluvias y a casi seis meses de haber arrancado con el “Programa de Emergencia de bacheo y repavimentación” en la capital de la entidad, el pasado 2 de enero.
Algunas calles que cruzan por el centro histórico de la ciudad como Nicolás Bravo hasta atravesar la calle Federico Hardy, a espaldas del Palacio de Gobierno, se observan “baches” de aproximadamente 50 centímetros de diámetro con una profundidad no mayor a los 10 centímetros. Esta avenida es concurrida principalmente por vehículos particulares, lo que acrecienta el daño sobre la carpeta asfáltica.
Otra vía que presentó daños severos años anteriores y que han comenzado a generarse nuevas fracturas y “baches” son sobre Manuel Gómez Pedraza, a espaldas del Museo de Bellas Artes y de la Iglesia del Carmen. Debido a la profundidad de algunos “baches” vecinos de la colonia han optado por rellenarlos con material de construcción como tabiques o tabicón y evitar daños a los vehículos. Además de que en las orillas de la vialidad se generan encharcamientos debido al desnivel del suelo.
Lo mismo ocurren sobre la calle Sor Juan Inés de la Cruz, en la que, además de los daños en la carpeta asfáltica, comerciantes han reducido a un carril la vialidad pues colocan cajas y botes para apartar espacios para sus vehículos, siendo que esta es una zona muy transitada debido a que en el lugar se encuentra el mercado 16 de septiembre de Toluca.
En Sebastián Lerdo de Tejada y Benito Juárez, la situación se repite con los “baches” que, aunque no son de la misma magnitud de los que se observaban en estas mismas fechas pero del año anterior, las unidades del transporte público, principalmente, evitan pasar sobre ellos evitar afectaciones mecánicas.
Cabe mencionar que las principales afectaciones se observan en calles en las que circulan frecuentemente vehículos particulares y unidades del transporte público, específicamente sobre los carriles de baja velocidad lo que genera un mayor caos vial debido a que es el carril confinado para el transporte público por lo que los choferes de las unidades reducen la velocidad o bien intentan evadirlos saliéndose del carril confinado.
Otras calles y avenidas que muestran daños de menor magnitud son: Melchor Ocamp; cerca de la Alameda central, José Vicente Villada, Venustiano Carranza, Jesús Carranza, Valentín Gómez Farías, y Heriberto Henríquez.
