El secretario de Seguridad Pública del Distrito Federal, Manuel Mondragón y Kalb, informó que continúan las pláticas formales entre la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la policía capitalina para revisar las condiciones del reglamento de uso de armas y las condiciones que han llevado a la secretaría federal a la posibilidad de cancelar la Licencia Colectiva de Armas de Fuego a la corporación local.
De esa forma, aún está pendiente la decisión de la Sedena, tras la detención el 6 de enero, en Mazatlán, Sinaloa, de los elementos de la Policía Bancaria Industrial (PBI), asignados como escoltas de Andrés Manuel López Obrador, quienes según la Ley Federal de Armas de Fuego y Control de Explosivos, no debían portar sus armas de cargo fuera del Distrito Federal.
El funcionario señaló que se sostienen reuniones entre las áreas jurídicas y de armamento de ambas dependencias para analizar «lo que ocurrió ahí para definir y afinar las circunstancias y lo que habrá que hacer al respecto».