A fin de prevenir inundaciones durante la temporada de lluvias y promover un entorno más limpio, el gobierno del Estado de México realizó una jornada de limpieza en las inmediaciones del Río Lerma. Se retiraron 34 toneladas de residuos sólidos, cascajo y azolve, además de 43 llantas abandonadas.

La jornada de limpieza llevó a cabo en la Avenida Revolución, municipio de Otzolotepec, donde se recolectaron 18 toneladas de azolve, nueve toneladas de escombros y siete toneladas de residuos sólidos urbanos.

Rubio Arronis destacó que estas acciones buscan reducir riesgos de inundaciones provocadas por la acumulación de desechos en calles, coladeras y cuerpos de agua. “El retiro oportuno de residuos es clave para proteger a las comunidades y prevenir daños materiales o riesgos sanitarios”, señaló.