Un equipo internacional de científicos y tripulación a bordo del buque de investigación oceanográfica Falkor Too, del Instituto Oceánico Schmidt, fue el primero en filmar al calamar colosal (Mesonychoteuthis hamiltoni) en su hábitat natural. El calamar bebé de casi 30 centímetros (cm) de largo fue captado en video a unos 600 metros de profundidad en el Océano Atlántico Sur.

El avistamiento ocurrió el pasado 9 de marzo durante una expedición cerca de las Islas Sandwich del Sur, en el Océano Atlántico Sur, durante una expedición de 35 días en busca de nueva vida marina, en ella colaboraron el Instituto Oceánico Schmidt, la Fundación Nippon-Nekton Ocean Census y GoSouth, la Universidad de Plymouth (de Reino Unido), el Centro GEOMAR Helmholtz para la Investigación Oceánica (Alemania) y el British Antarctic Survey.
Es emocionante ver las primeras imágenes de un calamar colosal bebé y es conmovedor pensar que no tienen ni idea de la existencia humana. Durante 100 años, los hemos encontrado principalmente como restos de presas en los estómagos de ballenas y aves marinas, y como depredadores de la merluza negra», dijo la Dra. Kat Bolstad, de la Universidad Tecnológica de Auckland.
Se estima que los calamares colosales alcanzan los siete metros de longitud y pueden pesar hasta 500 kilogramos, lo que los convierte en el invertebrado más pesado del planeta. Se sabe poco sobre su ciclo de vida, pero con el tiempo pierden la transparencia de los ejemplares jóvenes. Los pescadores han filmado a adultos moribundos, pero nunca se les ha visto vivos en profundidad.
Identifican otras especies de calamar pocas veces vista
Además, el 25 de enero, un equipo de la expedición anterior de Falkor, también filmó las primeras imágenes del calamar cristal glacial (Galiteuthis glacialis) en el Océano Antártico, cerca de la Antártida. El Galiteuthis glacialis es otra especie de calamar cristal que nunca antes se había visto viva en su hábitat natural.
El Dr. Aaron Evans, otro experto en la familia del calamares cristal confirmó las imágenes de ambos calamares. Bolstad y Evans señalaron que una de las características más distintivas del calamar colosal es la presencia de ganchos en el centro de sus ocho brazos, lo que ayuda a diferenciarlo del Galiteuthis glacialis.
Aaron Evans señaló que por lo demás, los calamares colosales juveniles y el Galiteuthis glacialis son similares, con cuerpos transparentes y ganchos afilados en el extremo de sus dos tentáculos más largos.
La primera grabación confirmada del Galiteuthis glacialis se filmó en el mar de Bellingshausen, cerca de la Antártida, durante la expedición de enero del Instituto Oceánico Schmidt, que examinó el lecho marino tras el desprendimiento de un iceberg del tamaño del Chicago de la plataforma de hielo George VI.
Avistamientos demuestran lo poco que conocemos el Océano Antártico: Jyotika Virmani
A bordo se encontraba el Dr. Thom Linley, experto en aguas profundas del Museo de Nueva Zelanda, quien alertó a su colega, Bolstad, mientras observaba la grabación desde la sala de control de la misión del buque. En la grabación, tomada a 687 metros de profundidad, el G. glacialis transparente coloca sus brazos relajados sobre su cabeza, similar a la pose de cacatúa que se observa comúnmente en otros calamares de cristal.
“El primer avistamiento de dos calamares diferentes en expediciones consecutivas es extraordinario y demuestra lo poco que hemos visto de los magníficos habitantes del Océano Antártico. Afortunadamente, captamos suficientes imágenes de alta resolución de estas criaturas para que los expertos internacionales, que no estaban a bordo, pudieran identificar ambas especies, declaró la directora ejecutiva del Instituto Oceánico Schmidt, la Dra. Jyotika Virmani.