Con rezos por la Pasión y Muerte de Jesús, meditación del Viacrucis, escenificaciones al interior de parroquias y actos de piedad en las calles, todo transmitido a través de redes sociales, así se vivió este día el Viernes Santo en los templos y capillas de la arquidiócesis de Toluca.
Debido a la pandemia de COVID-19 y la permanencia del semáforo epidemiológico en color naranja, por segunda ocasión consecutiva, se prohibió la puesta en marcha de procesiones y representaciones multitudinarias que por tradición se llevaban a cabo en las calles durante la Semana Mayor y sobre todo el Viernes Santo.
Este año, esta serie de actividades se llevaron a cabo de forma presencial al interior de las iglesias, con la participación del 30% de los feligreses, por ello se invitó a seguirlas desde las redes sociales. Durante la transmisión, el promedio de participación de los internautas que se unieron a estas actividades fue de unas 200 personas.
En otros casos, como pequeñas iglesias y parroquias, la asistencia virtual fue de 20 o 30 personas.
La Catedral de Toluca fue la que más alta interacción registró con poco más de 800 personas.
La mañana de este viernes, templos como El Ranchito, la parroquia de San Buenaventura, la iglesia de San Felipe de Jesús, la Santísima Trinidad de Metepec, la de San Miguel en Zinacantepec, ofrecieron el rezo del Viacrucis o una meditación de cada una de las 15 estaciones de la Pasión y Muerte de Jesús, con la participación de los fieles y los sacerdotes.
Un caso que destacó por su originalidad fue el de la Parroquia de San Miguel Arcángel de Zinacantepec, donde un pequeño grupo de jóvenes camino por las calles cargando en sus hombros una cruz de madera. A su paso, la gente se detenía para apreciar el esfuerzo de este grupos de feligreses.
También hubo otros de relevancia como el de Nuestra Señora del Refugio, donde se transmitió la escenificación de cada una de las estaciones del viacrucis, pero en un escenario al interior del templo.
