
Las personas solitarias y aisladas podrían tener un riesgo más alto de enfermedad cardiaca y accidente cerebro vascular (ACV), informa un estudio realizado por investigadores del Departamento de Ciencias de la Salud de la Universidad de York.
De acuerdo con los resultados, el aislamiento social aumenta 30% el riesgo de infarto o angina y en 32% de accidente cerebro vascular, la misma proporción que otros factores de riesgo como la ansiedad y el estrés laboral.
Los científicos aseguran que este factor debe de ser tomado en cuenta por los médicos, para tratar de cambiar el estilo de vida de las personas, al tiempo que abundaron que estar socialmente conectado también puede influir de forma indirecta sobre la salud al fomentar unas conductas saludables y un mejor cumplimiento del tratamiento médico, como tomarse las medicinas y acudir a las citas médicas.