Los arraigos y cateos en el Estado de México se han incrementado en un 100 por ciento, reconoció el magistrado José Castillo Ambriz, quien refirió que se trata de asuntos muy delicados vinculados con el crimen, donde la autoridad ministerial requiere tener el tiempo suficiente para que los responsables no evadan la acción de la justicia.
El presidente del Tribunal Superior de Justicia en territorio mexiquense, sostuvo que los problemas que se enfrentan con la delincuencia organizada han llevado a que se incremente el trabajo de la Procuraduría General de Justicia, y en consecuencia las solicitudes a los juzgados para que se concedan arraigos, o bien órdenes de cateo.
«Se trata de asuntos muy delicados donde el Ministerio Público tiene que integrar debidamente las averiguaciones previas, por lo tanto solicita la medida cautelar».
Refirió además que cuando el Ministerio Público considera que en determinado domicilio se presume la existencia de drogas, instrumentos que están relacionados con algunos delitos, o que en el interior puede estar una persona vinculada, entonces se ordenan los cateos.