Tras el anuncio en el que se dio a conocer que el tren ligero México-Toluca iniciará operaciones de manera real hasta el año 2024, el sector empresarial del estado de México confía en que aunque sea siete años después la obra quede concluida.
Gilberto Sauza Martínez, presidente del Consejo de Cámaras y Asociaciones del Estado de México (CONCAEM) aseguró que la obra que estaba planeada para ser entregada en 2017, ahora ha sido notificada para terminar pruebas en 2024, siendo una de las más relevantes que se tienen del gobierno federal y la cual permitiría fortalecer la relación que se tiene con la zona metropolitana del Valle de México.
Aseguró que más que una preocupación por cuando se concluirá, los empresarios están interesados en que realmente se termine, pues han tenido una serie de trabas que van desde el sobrecosto que ha significado, hasta constantes detenciones por la liberación del derecho de vía.
En lo que respecta a las inversiones que este podría traer consigo aseguró, que se está esperando el que las diferentes estaciones vayan poniéndose en operación, aún cuando los planes para la instalación de comercios y servicios se tienen desde hace al menos dos años.
Al momento el municipio que ha mostrado más interés por conocer del impacto vial, social y cultural que esta obra traerá, es el de Toluca con el cual se han establecido un mesas de manera permanente para trabajar en coordinación con todos los sectores de la sociedad.
El contrato lo ganó en licitación el consorcio conformado por Caabsa Constructora; Prefabricados y Transportes; Cargo Crane; Grupo Corporativo Amodher; Omega Construcciones Industriales y González Soto y Asociados.