El dar un paso atrás en el semáforo epidemiológico es una opción inviable y que representaría el peor de los escenarios económicos para el sector de restaurantes y venta de alimentos en el estado de México.

Mauricio Massud, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados en la entidad, explicó que al momento el sector acumula pérdidas por más de 25 mil millones de pesos, 50 mil fuentes de empleo perdidas y más de 10 mil unidades en cierre definitivo de tal suerte que se ha hecho un llamado para intensificar el cumplimiento de las normas en materia de salud y el protocolo Mesa Segura.
En conferencia de prensa conjunta con el Instituto de verificación administrativa del Estado y la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coprisem) se informó que solo durante la pandemia se han hecho más de 15 mil inspecciones por parte de la autoridad a diferentes establecimientos y sólo en los últimos días se registraron cinco cierres de bares en la capital del estado de México, resultado de qué no se cumplieron con las medidas de sanidad y los aforos permitidos.
Santiago Ramos Millán, comisionado Contra Riesgos Sanitarios aseguró que se están haciendo monitoreos constantes e inspecciones en las redes sociales con el fin de identificar si hay eventos sociales o establecimientos que estén operando fuera de autorización.
Con motivo de la realización del programa de descuentos el buen fin además se hará un despliegue de verificadores en centros comerciales, y lugares de concentración considerable, en coordinación con la Dirección de Protección Civil y eventualmente la Propaem, para esto se tienen destinados entre ambas instituciones alrededor de 340 verificadores.