En la actual temporada de lluvias, la bóveda del Río Verdiguel no presenta alguna situación que pudiera derivar en riesgo, informó el ayuntamiento de Toluca.
También señaló que la Coordinación municipal de Protección Civil hace recorridos permanentes para la evaluación de la infraestructura, además, añadió, al momento, el cauce del río está desazolvando al 100%.
Asimismo, se detalló que la infraestructura presenta buenas condiciones en la parte a cielo abierto de la delegación de Santiago Miltepec.
Se comentó también que apenas la semana pasada de hizo el más reciente recorrido luego de las intensas lluvias que se
registraron en esos días.
Cabe destacar que en febrero de 2020, la pasada administración municipal, enn coordinación con la Comisión de Agua de Estado de México (Caem) llevaron a cabo la reparación de varias fracturas que presentaba la infraestructura de la bóveda, en la parte de la zona centro de la capital mexiquense y con ello se minimizó algún riesgo de colapso.
Esa ocasión se comentó que el cauce del río se reduce en algunos puntos ya que la bóveda no es uniforme en proporción pues hay partes muy estrechas.
Uno de los puntos que se han detectado como graves es la parte que atraviesa el edificio Plaza Toluca, ubicado casi frente al Congreso local. A la fecha esa zona permanece cerrada pues dejaron de funcionar como oficinas del gobierno estatal.
En febrero de 2020 también se indicó que los tres los puntos de la bóveda más vulnerables son la parte que atraviesa por el edificio Plaza Toluca, donde ya se registró una fractura, el tramo cercano a la Plaza El Molino, y la estructura que pasa por Avenida de Los Maestros.
La infraestructura de la bóveda data de poco más de cien años. Su parte más antigua abarca al menos siete kilómetros que atraviesan la ciudad de Toluca.
Mencionar que el Río Verdiguel nace en más partes altas del nevado de Toluca y antes de pasar por la zona centro de la capital mexiquense se une al río cano, el cual proviene de la delegación de Santiago Tlacotepec, cruza la ciudad, se bifurca en los arroyos Tejalpa, Tlacopa y Miltepec, como canal a cielo abierto y desemboca en el Río Lerma. Su longitud desde su nacimiento es de 65 kilómetros
