El Banco de Alimentos del Estado de México consideró un acierto el que algunas administraciones tengan interés en retomar el programa de comedores alimentarios como una forma de ayudar a familias en condición de vulnerabilidad.
Aunque como institución de asistencia social no participará de manera directa en la operación de los mismos, Alberto Canul Juárez, director del Banco aseguró que si se han tenido acercamientos con autoridades electas para coadyuvar en la detección de familias que requieren seguimiento de apoyo permanente.
Desde la desaparición de este programa del Gobierno Federal explicó que se ha incrementado hasta en un 10 por ciento la solicitud de apoyos alimentarios.
Adicional a esto explicó que a lo largo de los últimos 18 meses el Banco ha apoyado además a personas que perdieron su empleo o tuvieron una disminución considerable en sus ingresos por estar relacionadas a los servicios o propinas.
Tal el caso de pepenadores, sepultureros, comerciantes de centros turísticos, meseros, boleros y sacerdotes a quienes en este periodo se entregaron alrededor de 50 mil paquetes alimentarios.
Señaló que fueron ayudas extraordinarias para personas que tuvieron problemas para llevar alimentos a sus familias y se analizará la viabilidad de darle continuidad al mismo.