Durante el acto protocolario de Transición al modelo homologado de Justicia cívica, que inicicia en la entidad con 8 municipios, Rodrigo Martínez-Celis Wogau, secretario de seguridad del Estado de México, afirmó que tal acto es significativo porque se ven concretados los esfuerzos por consolidar dicho modelo en nuestra amada entidad donde, las presidencias municipales han sido los impulsores.
“Los presidentes que son los verdaderos impulsores de este modelo, con una idea de que la solución se construye desde lo local, y así estamos trabajando juntas, y juntos; así como a los directores de policía directoras y directores de policía municipal, y demás miembros de los distintos ayuntamientos de los 125 municipios que son partícipes de este ejercicio y que a partir de hoy, buscaremos replicar de la mano estos ejercicios, lograr la pacificación de nuestro estado y de nuestro país”.
Es un reto que solo se logra a través de la suma de esfuerzos de acuerdo con el secretario, además del trabajo coordinado.
“Hoy gracias a esa suma de voluntades, nos acercamos a hacer realidad un proyecto que tuvo sus inicios en 2019, la implementación del Modelo Homologado de Justicia Cívica, política pública que se constituye como un pilar fundamental del Modelo Nacional de Policía y Justicia Cívica, y qué apuesta por mejorar la convivencia cotidiana a través de la prevención, atendiendo la resolución de conflictos comunitarios y las faltas administrativas, evitando así, que estas acciones escalen”.
El proyecto busca la transición de un modelo recaudatorio y punitivo de la justicia municipal, a uno restaurativo, preventivo y muy importante, de construcción de paz; refirió que el conflicto es parte inherente del ser humano y es la consecuencia de la convivencia diaria, de la pluralidad de ideologías, por lo que, como autoridades encargadas de preservar la seguridad, deben apostar por mecanismos que procuren la paz y que faciliten alternativas para solucionar problemas de la vida diaria, donde las partes sean pieza clave para poner fin a los conflictos, a través de la aplicación de los mecanismos alternativos de solución controversias, y de mediación.
Finalmente señaló que el Modelo de Justicia Cívica pone de manifiesto que la reconstrucción del tejido social es una responsabilidad compartida, y que compete tanto a las autoridades, como a miembros de la sociedad, y es fundamental comprender que los actos deben ser arrancarlos de raíz, y no actuar únicamente cuando se han desencadenado en un hecho ilícito. De ahí la importancia de prevenir.
Los municipios que transitaron al nuevo modelo son: Aculco, Atlacomulco, Chapultepec, Metepec, Mexicaltzingo, San Mateo Atenco, San Antonio La Isla y Tianguistenco.
