La calidad del servicio de transporte público en el estado de México requiere una regulación fuerte y efectiva para asegurar que los usuarios reciban un servicio congruente con las tarifas, según Gildardo Martínez Muñoz, experto en movilidad de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMex).
Martínez enfatizó que un servicio de calidad depende de la verificación de que las unidades cumplan con condiciones mecánicas y de imagen adecuadas, además de que los operadores realicen las paradas necesarias para la funcionalidad del servicio.
A pesar de los llamados a la mejora del servicio, el experto señaló una preocupación significativa: no existen estadísticas claras que indiquen cuántas unidades han agotado su vida útil o están en mal estado.
No obstante, se estima que alrededor del 80 por ciento de las unidades no cumplen con los estándares de calidad requeridos. Este bajo nivel de servicio contrasta con los aumentos recientes en la tarifa, que pasó de $12 a $14 pesos en el estado de México.
El experto indicó que es indispensable que el gobierno estatal garantice que los transportistas renueven sus unidades y mejoren la calidad de su servicio operativo. Señaló que actualmente, la falta de congruencia entre las promesas de mejora y el mal servicio que los usuarios continúan sufriendo es notoria tras el aumento tarifario.
Para lograr una mejora real, Martínez Muñoz insistió en la necesidad de implementar mecanismos de verificación y supervisión por parte de las autoridades. Argumentó que los transportistas tenderán a operar de la manera que consideren más conveniente, por lo que la intervención y vigilancia son cruciales para asegurar el cumplimiento de la calidad.
Finalmente, destacó que la mejora requiere el establecimiento de lineamientos claros y un compromiso palpable tanto de los empresarios como de los operadores del transporte.
