Los trabajos de confinamiento de la ciclovía de Paseo Colón, en Toluca, ya concluyeron hasta la Glorieta de la delegación de Capultitlán y también se incluyó la instalación de bolardos.
En general, el tramo que se extiende desde Paseo Tollocan hasta la calle Eduardo Hernández Cházaro, ya comienza a ser respetado por automovilistas, en especial en la zona del Hospital del Niño, pero en los últimos cien metros, poco antes de la Avenida del Pacifico, continúa la invasión de automovilistas en el espacio confinado.
Los ciclistas que circulan por esa zona solicitan algunas sanciones para los dueños de vehículos que insisten en no respetar este espacio exclusivo para el uso de la bicicleta.
El señor Mario Bernal circula a diario por la zona debido a su actividad laboral. Sin embargo, sus traslados, señala, representa un peligro pues de pronto tiene que interrumpir si trayecto e invadir los carriles vehiculares por la presencia de autos en el espacio de la ciclopista y con el peligro de sufrir algún accidente.
Durante un recorrido por la zona, se pudo observar que también las camionetas propiedad de los vendedores informales de la zona, sobre todo en las inmediaciones del acceso al Centro de Rehabilitación y Educación Especial (CREE ), Toluca, en especial los de venta de tamales, invaden el espacio para colocar sus unidades y recoger sus utensilios de trabajo al concluir sus ventas.
Situación que general altercados con algunos ciclistas quienes les exigen que respeten el espacio de la ciclopista. Fue el caso de Pablo Ríos, quién protagonizó cerca del medio día una discusión con los vendedores.
En general, se ve un incremento en los usuarios de la ciclovía de paseo Colon. También se observa que personal de limpieza hace labores constantes.
