La Universidad de Oslo realizó una investigación buscando posibles efectos genéticos del Yoga.
Se estudiaron a dos grupos de personas: los que hacen yoga y los que no.
Los resultados revelaron que los que no practican yoga cambia la expresión de 38 genes, mientras que con el programa de yoga el efecto se triplicaba con 111 genes modificados.
Tal vez nacemos con ciertas características genéticas y ciertas tendencias, pero esto prueba que podemos cambiar en aspectos como nuestra resistencia inmunológica, metabolismo y problemas degenerativos.