Comer almendras de forma regular podría ayudar a aumentar los niveles de colesterol HDL, mejor conocido como colesterol bueno, lo que ayudaría a disminuir el riesgo de enfermedades cardiacas y accidente cerebrovascular.
Nutricionistas de la Universidad Estatal de Pensilvania en Estados Unidos aseguran que los ácidos grasos Omega 6 y 9 que contienen las almendras ayudan a que el hígado elimine del torrente sanguíneo el colesterol LDL.
Este colesterol conocido como malo, forma acumulaciones capaces de bloquear los vasos sanguíneos, desencadenando padecimientos cardio vasculares.
En la investigación se dio seguimiento a dos grupos de personas con altos niveles de colesterol. Un grupo comió diario 43 gramos de almendras, mientras que el otro grupo consumió otro tipo de alimentos.
Los resultados indican que en el grupo que comió diario un puñado de almendras los niveles de colesterol bajaron.
Las almendras también aportan carbohidratos, fibra, potasio que ayuda a regular la presión arterial, calcio y hierro por lo que se recomiendan a personas con anemia.
