Investigadores señalan que el consumo regular de té podría proteger al cuerpo de una rigidez arterial en el corazón.
El cardiólogo Qing-fei del Hospital Municipal Wuyishan en China dirigió un estudio que analizó a bebedores de té habituales y no habituales.
Quienes han estado bebiendo té regularmente por más de seis años cuentan con niveles más bajos en engrosamiento de la pared arterial y la pérdida de la elasticidad.
El aumento del consumo del té se asocia con un menor riesgo de alguna enfermedad del corazón, muerte cardíaca, accidente cerebrovascular, infarto cerebral y hemorragia intracerebral.