Una vez que la esposa de uno de los candidatos a la presidencia de la república propuso terminar con el concepto de “primera dama” por considerarlo clasista, reflexionemos si estamos de acuerdo con esa idea o no.
Podríamos empezar por preguntarnos ¿qué nos han parecido las mexicanas del tercer milenio en la presidencia: Martha Sahagún de Fox; Margarita Zavala y Angélica Rivera?
Históricamente, lo de primera dama no es un nombramiento oficial ni tampoco un cargo público aunque comúnmente acompañan a sus maridos en los actos públicos donde se tratan temas de la sociedad y familia a la vez que las visitas a otros países y reuniones de relevancia.
Las primeras damas más famosas de la historia se recuerda a Eleanor Roosevelt por su activismo por los derechos humanos; a Eva Perón y su apoyo al voto femenino y a Michelle Obama en por su empatía con la gente.
¿Queremos a las sucesivas esposas de los presidentes de México activas o no?, ¿distinguidas o tampoco?, ¿es momento de asignarles un rol institucional?