El precio de la tortilla no incrementará si se aprueba la Ley Federal para el Fomento y Protección del Maíz Nativo, tal y como lo han anunciado asociaciones agroindustriales dedicadas a la producción de maíz híbrido en México.
De acuerdo con Everardo Lovera Gómez, presidente de la Federación de Productores de Maíz del estado de México, los industriales han generado una campaña de mentiras sobre las supuestas repercusiones que tendrían los productos derivados del maíz, afectándolos principalmente en su precio final al consumidor, sin embargo, ésta Ley beneficiaría al país y los mexicanos mejorando la calidad alimenticia.
“Ese cuento de que la tortilla va a subir es una vil mentira de esas gentes, eso no es cierto, no puede ser por que, precisamente, con esos programas del nuevo gobierno se está estableciendo una estrategia de revalorar la calidad alimenticia y no la cantidad o el uso industrial del maíz”.
Para el caso específico de los agricultores mexiquenses, esta iniciativa de ley podría incluso elevar la producción del maíz nativo, pues actualmente el estado de México es la entidad que genera mayor cantidad de toneladas del maíz criollo a nivel nacional, hasta 1 millón 600 mil toneladas; es decir, el 87 por ciento de todo el maíz que se produce en el estado.
La principal preocupación de los agroindustriales, dijo Everardo Lovera, radica en las ganancias que generan con la producción de maíz híbrido, el cual, han demostrado que no supera al maíz nativo en cuanto a la calidad nutrimental.
Explicó que estos productos, generados por los agroindustriales, nacen de la línea de maíces más baratos, pero con el objetivo de obtener combustibles o plásticos, no así para el consumo humano, a diferencia del maíz nativo y pigmentado el cual –asegura– protege a los consumidores de cáncer y no propicia la diabetes u obesidad.
De aprobarse esta Ley Federal para el Fomento y Protección del Maíz Nativo tampoco se corre el riesgo de desabastecimiento, pues además de las mejoras en la alimentación, en un periodo de cinco años México recuperaría su autosuficiencia como antes de la desaparición de la CONASUPO, siempre y cuando exista un estímulo al pequeño productor.
Finalmente recordó que, además de la iniciativa de ley a nivel federal, se mantiene una iniciativa similar en la legislatura local que contempla reglas de operación en la distribución de recursos y especifica que el 20 por ciento del presupuesto total para el sector debe dirigirse al programa de maíz.
