Aunque en promedio la sobrepoblación penitenciaria en el Estado de México ha bajado hasta quedar en un 78 por ciento, lo que se puede calificar como un gran avance, todavía hay reclusorios que están rebasados hasta en un 370 por ciento, como el Neza-Bordo de Xochiaca, que tiene una capacidad instalada para mil 50 internos y sin embargo alberga a tres mil 900.
El visitador de Programas Especiales y del Sistema Penitenciario, de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, Federico Armeaga, señaló lo anterior y agregó que si bien ha habido trabajo por parte de la autoridad penitenciaria para despresurizar los reclusorios, el problema es la metodología que ha utilizado, pues no es fácil conseguirles a todos los internos un beneficio de prelibertad o de uso de brazaletes.
Comentó que la Codhem ya concluyó con la guía de supervisión penitenciaria que se realiza año con año, a efecto de verificar las condiciones en los centros de prevención y readaptación social, y aunque ha habido trabajo de la autoridad, desafortunadamente las mejoras son casi imperceptibles
Apuntó que en promedio se registra una sobrepoblación de alrededor del 78 por ciento, lo cual pudiera ser un logro porque el año pasado alcanzaba el 200 por ciento, no obstante, tiene sus observaciones como sucede con los centros preventivos del valle de México
Por ejemplo, comentó, el penal de Neza-Bordo de Xochiaca tiene una capacidad instalada para mil 50 internos, pero actualmente alberga a tres mil 900 reclusos; entonces ahí se está hablando incluso de una sobrepoblación del 370 por ciento.Aunque también hay centros preventivos como Tenancingo donde hay 150 internos, o bien la penitenciaría modelo que tiene una capacidad para 300 reos, y solamente tiene en reclusión a 103 presos, entonces ahí es donde se va nivelando.