Elon Musk lleva años prometiendo que el verdadero coche autónomo estaba a punto de llegar. En 2016, al modelo que Tesla estaba desarrollando solo le quedaban “dos años de distancia”. Un año después, eran “seis meses”. Sin embargo, llegó 2018 y el contador empezó de nuevo: el automóvil sin conductor tenía que esperar un año e iba a ser “un 200% más seguro” que la conducción humana. El 2019 iba a ser el año en que habría “conducción autónoma completa”, según el empresario. Y así hasta llegar a 2024.
Durante esta madrugada, en el evento ‘We, Robot’ de Tesla, Musk ha mostrado al mundo uno de sus productos más esperados: un prototipo de su nuevo vehículo eléctrico dedicado a la conducción autónoma, que representa por fin un paso adelante en su filosofía de un futuro de coches sin conductores después de años de plazos incumplidos.
Tesla planea lanzar la conducción totalmente autónoma en Texas y California el año que viene y la producción del Cybercab en 2026, aunque Musk ha reconocido que podría retrasarse a 2027. Sobre su expansión fuera de Estados Unidos, el empresario no ha mencionado nada, así que Europa y España podrían tardar todavía en ver esta avanzada tecnología, probablemente tendremos que esperar a la próxima década.
Así es el nuevo robotaxi de Tesla: descubrimos el Cybercab
El Tesla Cybercab, más conocido como robotaxi, es un coche autónomo construido especialmente para su cometido. No lleva volante ni pedales, lo que significa que necesitará la aprobación de los reguladores antes de entrar en producción. Pero más que la ausencia de estos elementos, lo que ha llamado a atención es que el vehículo no tiene enchufe: Musk ha dicho que se carga por inducción para recuperar energía de forma inalámbrica.
En cuanto a su diseño, y como no podíamos esperar de otra forma, el aspecto es futurista, con puertas que se abren hacia arriba, y la cabina tiene espacio para solo dos pasajeros.
Según el dueño de Tesla, los coches autónomos van a ser entre 10 y 20 veces más seguros que los vehículos conducidos por humanos. Musk incluso se ha atrevido a poner precio a una de sus grandes aspiraciones: podrían costar 0,20 dólares por milla —unos 0,18 euros por cada 1,6 kilómetros aproximadamente—, en comparación con el dólar por milla de los autobuses urbanos en Estados Unidos.
“Es un gran logro”, ha afirmado Musk. “Salvará vidas, muchas vidas, y evitará lesiones”, ha añadido. Además, ha insistido en que los coches autónomos son una forma de ahorrar tiempo: “Piensen en el tiempo acumulado que la gente pasa en un automóvil”, dijo, “y el tiempo que recuperarán y que ahora podrán dedicar a sus libros, a ver una película, a trabajar o lo que sea”.
A pesar de la obstinación del CEO de Tesla con respecto a crear su Cybercab, los expertos desconfían de su materialización y muchos cuestionan la tecnología específica que ha elegido Musk para su producto, especialmente en lo que respecta a los sistemas avanzados de asistencia al conductor de nivel 2, como el piloto automático y la conducción autónoma completa.
Otras compañías, como Waymo y Cruise, ya están probando sus robotaxis sin conductor, aunque no han estado exentas de problemas: desde atropellos hasta funcionamientos erráticos.
La robovan y los nuevos robots humanoides Optimus
Tesla también ha mostrado una nueva furgoneta autónoma a la que ha llamado ‘robovan’ y que ha cogido por sorpresa al público. La camioneta sigue la estela futurista del Cybercab y tiene capacidad para una veintena de personas. También puede usarse para transportar mercancías, si bien no ha especificado la cantidad de estas que podría llevar.
Por otro lado, Musk ha confirmado de nuevo que se está desarrollando Optimus, que podría estar disponible por entre 20.000 y 30.000 dólares y será capaz de realizar tareas cotidianas de casa, como regar las plantas. Esto es algo que el CEO de Tesla ya había adelantado que sus robots humanoides podrían hacer, incluso llegó a decir que en el futuro cuidarían de nuestros hijos y nuestras hijas, si bien hasta ahora solo lo hemos visto desplegado en fábricas.
El androide puede, además, hablar. O al menos eso demostró en la presentación, cuando llamó a Musk ‘Tecnorey’. Durante el evento, los robots Optimus pusieron bebidas, bailaron y después un grupo de ellos salió a la calle junto a la robovan.
