Un estudio realizado por la Universidad Estatal de Míchigan, en Estados Unidos, asegura que el ácido graso presente en el aceite de pescado y en los suplementos dietéticos, conocido como Omega 3, tiene el potencial de prevenir el lupus, una enfermedad crónica autoinmune que ataca por error las células y los tejidos sanos.
En la investigación realizada con ratones con lupus se descubrió que, tras 2 semanas, los ratones que fueron alimentados con Omega 3 tuvieron significativamente menos lesiones pulmonares que los que ingirieron la dieta de control y en los que no tenían la enfermedad, los ácidos grasos ayudaron a prevenir el padecimiento.
De acuerdo con autoridades de salud, 9 de cada diez pacientes con lupus son mujeres y esta enfermedad afecta la piel, cerebro, riñones y los pulmones.
