Es posible que con la llegada de esta temporada invernal la gente percibe cambios en su estado de ánimo. Y es que la llamada depresión invernal o ha aumentado en los últimos años, afectando un poco más a la población de adultos mayores, sobre todo a la mujer, destacó Julieta Garay López, investigadora de la Facultad de Ciencias de la conducta de la Universidad estatal.
Garay López explicó que este tipo de depresión está relacionada con el cambio de estaciones y suele aparecer con más frecuencia durante el otoño e invierno pues mencionó que una causa pudiera ser la falta de luz solar y sus repercusiones en la baja en los niveles de serotonina.
Mencionó que la depresión invernal se manifiesta con un estado de tristeza en general o de desesperanza. Sus síntomas más frecuentes, añadió, es la perdida de interés, poca energía, trastornos del sueño y de la alimentación e invariablemente, añadió, pensamientos con tendencia al suicidio.
Por ello recomendó que el mejor tratamiento para quienes detecten estos síntomas o ya a padezcan es la búsqueda de ayuda de un profesional quien le ofrecerá terapia congnitivo-conductual, en la cual los pacientes pueden expresar sus pensamientos, sentimientos y hablar de aquello que los está afectando.
La investigadora especialista en el tema de depresión añadió que la terapia permitirá a las personas tener una mejor calidad de vida: “hablar de cómo nos estamos sintiendo nos permite oírnos y decir, por qué me siento así, por qué siento tristeza”.
Por: Ana Hernández