Con un peso de dos toneladas y media cada uno, este miércoles fueron enviados a Tokio, Japón, tres árboles de la vida creados por el artesano metepequense Juan Carlos Nonato, quien acudirá a tierras orientales a terminar el trabajo en compañía de su esposa Teresa León Terrón y su mamá Josefina Díaz Rodríguez.
De acuerdo con el oriundo de San Miguel Totocuitlapilco, las tres piezas monumentales que tienen como tema principal La Vida Marina, fueron envueltas e espuma de poliuretano y empaquetadas en cajas de madera, las cuales son transportadas en tráileres hasta el Puerto de Manzanillo donde zarparán en barco rumbo a tierras niponas.
Fueron dos meses los que tardó Juan Carlos Nonato en elaborar las piezas que conforman cada uno de los tres árboles de la vida, tiempo en el que le ayudan su esposa, su mamá y hasta los más pequeños de la casa, para fabricar piezas extras para llevar “por si se rompe alguna”.
Nonato se dijo orgulloso de que sus obras sean reconocidas en el extranjero y que durante el armado en Japón, siempre tiene cientos de espectadores que curiosos observan cómo trabajan el barro mexiquense.
El empaque de poliuretano y dos boletos de avión fueron otorgados al artesano Juan Carlos Nonato por el ayuntamiento de Metepec, mientras que la diputada Laura Barrera Fortoul y la senadora Carolina Monroy le otorgaron los viáticos para su estancia en Japón.