El azúcar que contienen los refrescos, bebidas de fruta, tés dulces y bebidas energéticas aumentan 35 por ciento el riesgo de ataque cardiaco, así lo advierte una investigación realizada por la Universidad de Harvard en Estados Unidos.
De acuerdo con el estudio consumir una o dos porciones al día de este tipo de bebidas también aumenta 16 por ciento en el riesgo de accidente cerebro vascular y hasta un 26 por ciento el riesgo de contraer diabetes tipo 2.
Los científicos advierten que esto se debe al alto contenido de azúcares, pues tan solo una lata de refresco contiene unos 35 gramos de azúcar, lo que equivale a casi nueve cucharaditas del endulzante.
El consumo excesivo de fructosa también puede conducir a un exceso de ácido úrico en la sangre, que está asociado con un riesgo más alto de la enfermedad conocida como gota.