Hace una semana que el Senado de la República aprobó castigar con tres años de prisión a quienes nieguen empleo, servicios o derechos a discapacitados o por motivos de religión.
Respecto al segundo tema, la discriminación sobre religión, es donde se más se nos pondrá a prueba a quienes vivimos en esta ciudad capital pues en las últimas tres encuestas del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación nuestras ciudad aparece invariablemente en los primeros tres sitios de país donde más se excluye a causa de la religión.
A los habitantes en general de Toluca nos causa enojo, molestia o disgusto y actuamos con esos sentimientos de cara a quienes creen en una religión distinta a la nuestra o porque no profesa alguna religión.
Desde ahora tendremos que aprender a escuchar y aceptar a los demás o entre católicos, no creyentes, pentecostales, evangélicos, adventistas del séptimo día, mormones y testigos de Jehová en el trabajo y la calle.
Y no tendría porqué ser de otra manera pues la libertad religiosa es un derecho fundamental tanto como la libertad de pensamiento.
