¿Qué será lo conveniente hacer respecto a las declaraciones del presidente de México relacionadas con su relevo en el 2024?, ¿reír o llorar?
Escucha la opinión de Patricia Maldonado. ¡Dale play!
Ayer el mandatario volvió a hablar de las elecciones presidenciales a desarrollarse en tres años y dijo que él es “el destapador” y su “corcholata favorita” será la opción que elijan los mexicanos, aunque habría que precisar que ésta vendría en primer lugar de su partido político.
Lo de causar risa o llanto es que se ocupe de un tema para el que falta mucho, más que de concentrarse en dar salida a los problemas y necesidades de país. Se infiere pues que ya se quiere ir o que ya le gustaría irse. También de que no ha logrado hacer y por eso recurre a temas como la sucesión.
Pero le guste o no, lo mismo que a seguidores, él aseguró el primero de diciembre de 2018 que estaba preparado “para no fallarle” a su pueblo y que ese era su compromiso. No vengamos ahora adelantando deseos salvadores. La presidencia se ostenta con trabajo y determinación. Es tiempo de proponer iniciativas de mejora a la calidad de vida de los mexicanos, levar a cabo obras públicas, preservar la seguridad nacional, dirigir la política exterior, etcétera. No de hacernos caer en lamentaciones a los gobernados a través de la risa o el llanto. La elección que le dará salida a su cargo ya vendrá.