Las escuelas se han convertido en un agente determinante de la mala alimentación por el alto consumo de comida chatarra que ofrecen a los menores, así coincidieron las organizaciones civiles «El Poder del Consumidor» y la «Red por los Derechos de la Infancia en México» (REDIM), quienes hicieron un llamado a las autoridades educativas, para priorizar los derechos a la salud y una alimentación adecuada durante el ciclo escolar 2023-2024.
Mauro Brero, jefe de Nutrición de la Unicef México, indicó que en el país ocho por ciento de los niños de 0 a 5 años tienen obesidad y la cantidad se dispara a 38 por ciento cuando los niños pasan del cuidado de la familia a la escuela.
Se añadió que cada año la obesidad infantil le cuesta al Estado 650 mil millones de pesos y a través de un ejercicio de vigilancia ciudadana a nivel nacional, se reporta que 9 de cada 10 escuelas venden comida chatarra. Y solo 2 de cada 10 venden alimentos saludables.
Es por ello que la UNICEF advirtió que el sobrepeso y la obesidad infantil representarán una fuerte carga para la economía y el desarrollo nacional.
El Poder del Consumidor y la REDIM a través de la plataforma Mi Escuela Saludable, realizaron un ejercicio de vigilancia ciudadana a nivel nacional durante el ciclo escolar 2022-2023, periodo en el que se recibieron un total de 13 mil 432 reportes a 9 mil 381 escuelas del país
Los hallazgos fueron que 98 por ciento de estas instituciones venden comida chatarra; 76 por ciento refrescos con azúcar y 93 por ciento comercializan bebidas azucaradas y en el 75 por ciento de las escuelas tienen venta externa de comida chatarra.
Y solo en dos de cada 10 tienen acceso a frutas y verduras y bebederos funcionales. 1 de cada 10 venden semillas y cereales integrales.